El grupo de belleza iniciará este proceso en el Reino Unido en los próximos meses, funcionando las tiendas como franquicias administradas por las distribuidoras de Avon.
Este nuevo impacto de la marca se suma al desplegado recientemente tras asociarse con la cadena de belleza y farmacia Superdrug y que ha visto como los productos de Avon se vendas en las tiendas principales del Reino Unido por primera vez.
Para la compañía estos movimientos comerciales suponen un importante cambio de estrategia, dejando un poco aparcado el modelo tradicional de puerta a puerta, aunque todavía mantiene un gran número de distribuidoras tradicionales.
Los planes de las tiendas en el Reino Unido son parte de un movimiento global más amplio hacia el comercio minorista físico, que se desarrolla en mercados como Brasil, Sudáfrica y Turquía, primer país donde comenzó este proyecto y que ha visto aumentada notablemente sus ventas.
Angela Cretu, directora ejecutiva global de Avon International, dijo a la agencia de noticias PA: «Estamos en la cúspide de nuevas fronteras para Avon». «Es un nuevo y emocionante capítulo«.
Para la ejecutiva de la compañía la expansión a las tiendas físicas se hace como respuesta al hecho de que la mayoría, el 80%, de las compras de productos de belleza se realizan a través del comercio minorista.